tras el terrible atentado perpetrado en Manchester que acabó con la vida de 22 personas y dejó casi un centenar de heridos, la madre de Ariana Grande tuvo una especial relevancia tras el suceso, ya que contribuyó a que las consecuencias del terrible ataque no fuesen peores. Joan Grande refugió a un grupo de fans a dentro del camerino de la cantante con el fin de velar por su seguridad hasta que todo se calmase. Gracias a la rápida actuación de la madre de Ariana, los jóvenes pudieron abandonar el estadio con total seguridad evitando el caos y las escenas de pánico que se vivieron en el recinto.
La explosión tuvo lugar mientras las más de veinte mil personas que asistieron al concierto estaban saliendo del pabellón, con Joan Grande aún sentada en primera fila. Según informa la publicación TMZ, la madre de la estrella del pop actuó con rapidez acompañando a un grupo de diez fans hasta el camerino para ponerlos a salvo en cuanto vio la situación de caos que se extendía por el pabellón. Muchos supervivientes han contado las escenas de pánico que se vivieron tras el atentado.
Poco después, Ariana Grande confirmaba que ni ella ni nadie de su equipo habían resultado heridos, y escribía un mensaje en las redes sociales asegurando sentirse muy afectada. "Estoy rota. Desde lo más profundo de mi corazón, lo siento mucho. No tengo palabras”, dijo la cantante que ha cancelado por el momento su gira hasta que se recupere emocionalmente.Ariana Grande tenía previsto ofrecer un concierto esta semana en Londres para continuar después su tour por Europa, en el que visitaría Barcelona, donde estaba prevista su actuación el 13 de junio.